«No lo ha preocupado cuando el ex presidente Mauricio Macri recibió al imputado Luis Chocobar en la Casa Rosada», espetó el mandatario.
El presidente Alberto Fernández afirmó hoy que «el Poder Judicial y sus magistrados y funcionarios no están ni podrían estar exentos de críticas y opiniones en una sociedad democrática», al contestar la carta que el Procurador General de la Nación, Eduardo Casal, le entregó al ministro de Justicia y Derechos Humanos, Martín Soria, tras una entrevista que el mandatario brindó el miércoles.
Casal había considerado una «perturbación» las expresiones que el jefe de Estado formuló sobre la actuación del fiscal Diego Luciani en el juicio que se sigue por el presunto direccionamiento de la obra pública en Santa Cruz, entre 2003 y 2015, y que tiene como imputada a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Fernández consideró que «el Sr. Procurador expresa su preocupación por una supuesta injerencia por parte del Presidente de la Nación en un proceso penal, pero no lo ha preocupado, ni ha visto injerencia alguna cuando el expresidente Mauricio Macri, estando en ejercicio del cargo, recibió al imputado Luis Chocobar en la Casa Rosada».
«Y, mientras transcurría el juicio en el que este terminó condenado, publicó en su cuenta oficial de Twitter que ‘lo acompañamos y que confiamos en que la justicia en otra instancia lo liberará de todo cargo, reconociendo su valentía’», refirió.
Fernández recordó que «tampoco llamó la atención del Sr. Procurador que el expresidente Mauricio Macri, también en ejercicio de sus funciones presidenciales, directamente instruyera a su Ministro de Justicia para que iniciara juicio político al juez Alejo Ramos Padilla».
Para Fernández, «como puede deducirse, resulta de suma importancia que las opiniones que alertan sobre los peligros que pueden acechar a las democracias sean formuladas a tiempo y en forma pública».