El diputado libertario mostró el rostro que solo insinúa en la Argentina.
Como estaba previsto, Javier Milei participó este sábado de un acto partidario del partido ultraderechista español VOX, junto a otros líderes del neofascismo europeo. El diputado afianza así los vínculos internacionales de La Libertad Avanza con fuerzas políticas afines.
En su discurso, el adalid local de la libertad la emprendió contra “el zurderío” y contra todas las libertades individuales y sociales, cuestionando la “ideología de género, los pueblos originarios, la agenda ecologista y el lenguaje inclusivo”.
Según el libertario, se trata de temas que “destruyen los valores de la sociedad” tradicional, en consonancia con los “valores” defendidos por sus anfitriones de VOX, nacionalistas de ultraderecha que pretenden defender “la hispanidad”.
“Mi charla de hoy va a ser sobre la batalla cultural y sobre la economía”, anticipó Milei al principio de su alocución, en la que repitió una y otra vez “batalla contra el socialismo”, “zurdos” y “zurderío”, habituales también en sus discursos locales.
Pero evitó mencionar su latiguillo más famoso: la palabra “casta” estuvo ausente en su discurso de unos 15 minutos, ya que hace alusión directa a sus anfitriones de VOX, quienes conforman esa casta -en su sentido peyorativo- definida antes que Milei por el partido Podemos, para criticar a los funcionarios del PP y sus herederos más radicales: los dirigentes actuales de VOX.
Para cerrar su discurso, el diputado vociferó “viva la libertad, viva VOX…”
El partido que lo invitó, como se sabe, se fundó en 2012 como reagrupamiento de los sectores más conservadores y derechistas del Partido Popular español, buscando “recoger el voto de la derecha desencantada con las políticas del PP”, entonces instrumentadas por Mariano Rajoy.
De hecho, criticaban al PP de entonces por ser “demasiado moderado en cuestiones como los valores tradicionales, la unidad nacional o la libertad económica”, calificando al partido gobernante como «la derechita cobarde».
Santiago Abascal, su presidente, a quien Milei también le dedicó un “viva”, mantiene fuertes vínculos con líderes de la extrema derecha europea, como la francesa Marine Le Pen (FN), la alemana Frauke Petry (AfD) y el neerlandés Geert Wilders (PvV).
Todos ellos tienen características comunes: opositores a libertades y derechos individuales, conservadores en lo cultural, adversarios de los derechos sociales, laborales y económicos de las mayorías y, obviamente, neoliberales en lo económico.